Holaa! Antes de nada, quiero avisar que ésta misma entrada se encuentra en mi nuevo blog, ya que estoy iniciando la mudanza, y he decidido que ésta será la primera publicación. Por lo que, os recomiendo hacer clic en el enlace para visitarlo.
Como todos sabréis por mi anterior publicación, me uní a un Amigo Invisible Navideño en el Blog: En el país de las maravillas (que realmente recomiendo visitar), igual que el año anterior. En 2013 a mí me tocó hacerle el regalo a Alice, nadie más y nadie menos que la organizadora.
Hoy, después de recibir un mensaje hace unos días sobre que mi paquete ya estaba en camino, me he encontrado con un paquete de correos en mi mesa.
He tardado en empezar a abrirlos lo que mi madre en preparar la cámara del móvil. Así pues, he abierto el paquete y he ido sacando regalitos. Aquí las fotos [haz clic en ellas para verlas en tamaño original].
La preciosa yo, abriendo el paquete y sacando regalitos |
Mi cara de felicidad no tiene límites |
Chuches y una carta. |
En la carta, que por cierto era una cucada, mi amiga invisible delataba su identidad. Y era, nadie más y nadie menos que... Alice! La administradora del blog que lo organiza, a quién yo le hice el regalo el año pasado!
Me he puesto muy contenta al saber que era ella mi amiga invisible, y he empezado a abrir los regalos, del más pequeño al más grande.
Me he encontrado con una bolsita de chuches, un par de palitos de caramelo navideños, una tableta de chocolate de lacasitos, una libreta monísima y puntos de libro en los paquetes más pequeños.
Y, de libros, me ha regalado la segunda parte del manga Lovenista de Kayono, (en la fotografía aparezco posando junto con el primero también), y el libro de La música del silencio, de Patrick
Rothfuss (libro que estaba DESESPERADA por tener).
De hecho, mi reacción al ver el libro ha sido tan épica (mis chillidos y gritos de euforia deben haberse oído por todo el vecindario) que he decidido hacer un gif.
En definitiva, me ha encantado este amigo invisible, ha acertado en todo lo que me ha regalado y voy a disfrutar muchísimo con todo. (De hecho, ya casi no quedan chuches...)
¡Besos!